Representantes de la Comisión Ejecutiva del SOMA-FIA-UGT han visitado esta mañana las instalaciones del Centro de Mayores que el Montepío de la Minería Asturiana está construyendo en la localidad allerana de Felechosa. Se trata de uno de los proyectos emblemáticos de la reactivación, financiado con 31 millones de euros de fondos mineros. El presidente de […]
Representantes de la Comisión Ejecutiva del SOMA-FIA-UGT han visitado esta mañana las instalaciones del Centro de Mayores que el Montepío de la Minería Asturiana está construyendo en la localidad allerana de Felechosa. Se trata de uno de los proyectos emblemáticos de la reactivación, financiado con 31 millones de euros de fondos mineros.
El presidente de la mutualidad y también miembro de la dirección del sindicado, José Antonio Postigo, acompañó a la delegación del sindicato durante el recorrido de las instalaciones y fue explicando las particularidades de los espacios del centro, que tiene 150 habitaciones dotadas con todas las comodidades y un sistema telemático que permite el control del residente las 24 horas del día para su propia tranquilidad y la de sus familiares. El centro también cuenta con un complejo termal, con zona de balneario, piscinas y spa donde se prestarán tratamientos de hidroterapia. El inmueble posee amplias áreas verdes, en las que está previsto instalar aparatos de gimnasia, barbacoas e incluso pequeños huertos.
La delegación de la federación ha quedado impresionada por las modernas instalaciones y ha destacado la buena marcha de las obras de la residencia, cuyos plazos de ejecución van muy adelantados. Sin embargo, durante el recorrido se ha mezclado un sentimiento agridulce, ya que motivos de salud han impedido al secretario general, José Ángel Fernández Villa, estar presente en la visita, sobre todo teniendo en cuenta su firme apuesta por el proyecto desde el primer momento.
El SOMA-FIA-UGT sostiene que el centro, que aspira a convertirse en un referente de la atención a mayores, es un ejemplo de los proyectos que las comarcas mineras necesitan para profundizar en su proceso de modernización, ya que presta un servicio esencial en unas zonas cuya población presenta un alto índice de envejecimiento y además está contribuyendo a generar puestos de trabajo estables y de calidad, algo que cobra aún más relevancia en la situación de crisis actual, que está destruyendo numerosos empleos.
